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¿Qué son las mamas tuberosas?
Las mamas tuberosas son una deformidad mamaria que, en la mayoría de los casos, se produce sin que la paciente sea consciente o se de cuenta. Se manifiestan únicamente a través de la forma de la mama que se presenta distinta a la habitual. Esta deformidad se caracteriza por:
🔸 Falta de tejido mamario por debajo del borde de la areola.
🔸 Falta de surco submamario que impide que la glándula se expanda.
🔸 Por la falta de surco anteriormente mencionado, se concentra el poco tejido mamario detrás de la areola.
Esto hace que las mamas en lugar de tener un crecimiento redondeado se desarrollen de forma tubular, se caigan hacia abajo, la aureola tenga un tamaño excesivo y los pechos queden mucho más separados de lo habitual.
Además, es frecuente que las mamas sean asimétricas. Es decir, cada mama puede tener un grado de tuberosidad distinto de la otra (tanto en volumen como en forma). También puede pasar que una mama se desarrolle de forma habitual mientras que la otra sea tuberosa.
¿Qué grados de tuberosidad existen?
Como comentábamos en el apartado anterior existen diferentes grados de tuberosidad. Es importante identificar y marcar las diferencias entre ellos para un tratamiento adecuado:
🔹 Grado leve: es el más común de todos. Se caracteriza porque la parte inferior del cuadrante interno de la mama no se desarrolla. Esto hace que la aureola se vea hacia abajo.
🔹 Grado moderado: se da por un mal desarrollo de la parte inferior externa de la mama o porque existe piel deficiente en la zona subareolar. En este caso la areola se presenta dilatada y con un tamaño excesivo.
🔹 Grado grave: destaca por una afección grave de los cuadrantes mamarios y que lleva a que la areola esté herniada.
¿Quién es el paciente ideal para esta cirugía?
Esta operación está destinada a cualquier persona que tenga diagnosticada una mama tubular y quiera corregir la malformación de su pecho ya que, con frecuencia, esta afección suele causar complejos o malestar psicológico a quien la padece.
Importancia del diagnóstico
Es muy importante realizar un estudio de caso de cada paciente ya no solo para preparar la cirugía posterior y aplicar el tratamiento correcto para conseguir un resultado óptimo tanto a nivel visual como de salud, sino además porque en muchas ocasiones los pacientes acuden a consulta porque piensan que tienen el pecho raro y quieren una elevación o un aumento sin saber que en realidad lo que tienen son mamas tuberosas.
De la misma importancia es contactar con un cirujano profesional capaz de dar un tratamiento personalizado y adaptado a cada tipo de mama tuberosa para lograr una intervención exitosa. En la Clínica Weigand somos especialistas en las mamas tuberosas. Te invitamos a que contactes con nosotros sin compromiso. Estaremos encantados de resolver todas las dudas que puedas tener y de acompañarte en todo el proceso.
Cirugía, anestesia y técnicas
Esta intervención tiene por objetivo la remodelación de la mama. En función del grado de tuberosidad se emplearán diferentes técnicas como puede ser, por ejemplo, la mamoplastia o la mastopexia, entre otras. También pueden colocarse implantes.
Lo que se consigue por medio de esta cirugía es:
🔸Corregir las asimetrías de las mamas o de la mama en cuestión.
🔸En caso de que la areola esté deformada o tenga un tamaño excesivo, reducir su tamaño y corregir su forma.
🔸Conseguir un pecho redondeado mediante la eliminación de la forma tubular o de tubo.
🔸Elevar la mama para que deje de tener un aspecto caído.
🔸Aportar volumen a aquellas zonas que lo necesiten.
🔸Si el surco mamario está afectado, recrear uno nuevo.
🔸Para esta cirugía la anestesia más indicada es la general. Dependiendo del grado de tuberosidad y el tipo de intervención la operación puede tener una duración mayor o menor. No obstante, por lo general, suele comprender entre 1 o 2 horas. Siendo el tiempo de duración de la anestesia muy similar al de la cirugía.
Preoperatorio
El paciente debe seguir las instrucciones del cirujano para prepararse para la operación y garantizar el éxito. Además, debe informar a los profesionales de la toma de medicamentos o si fuma, porque es muy recomendable no fumar, ya que el tabaco puede alterar el riego sanguíneo, clave para la cicatrización.
Postoperatorio
No suele ser necesario colocar drenajes debido a que el sangrado es mínimo (a excepción de algunos casos). Por lo que una vez que la paciente se ha despertado de la anestesia se le lleva a la sala de recuperación y estará vigilada durante un par de horas. Después se le trasladará a la habitación y permanecerá ingresada durante 24 horas. El tiempo necesario para que los especialistas puedan retirarle el vendaje y colocar un sujetador especial para el postoperatorio.
🔺La recuperación no debería ser complicada y la paciente podrá hacer vida completamente normal tras 8 o 10 días. En cuanto a los cuidados, no distan mucho de las intervenciones de aumento de pecho.
Ventajas
Como comentábamos anteriormente, las mamas tuberosas suelen causar grandes complejos físicos y problemas psicológicos. Por ello someterse a la cirugía para recuperar el aspecto normal del pecho conlleva muchos beneficios, especialmente en estas áreas. Por ejemplo, devuelve a la mujer su autoestima, le brinda una mayor confianza en sí misma, le ayuda a mejorar sus relaciones interpersonales y hace que pueda disfrutar de su sexualidad sin complejos.